
Una
nota del
Señor
para ti...
Estoy
seguro
que esta
nota te
llega en
el
momento
indicado,
léela
con
atención:
¿Sabes
que tú
eres la
persona
más
especial
que Dios
tiene?
Él te
está
viendo
en este
momento
tal cual
tú eres
y sabe
perfectamente
de tu
situación,
de tu
pecado,
de tu
dolor,
de tus
errores y
aunque
tú te
sientes
rechazado
y
pecador,
Dios te
dice en
este
momento:
“Tú eres
lo mas
hermoso
para mi”
quiero
que seas
restaurado,
quiero
que
puedas
saber
que
aunque
te
sientes
miserable,
yo veo
en ti un
valor
incalculable
y de la
miseria
que tu
ves en
ti yo
haré de
ella un
piedra
preciosa,
un
instrumento
de mi
amor,
para que
otros
vean
cuan
maravillosas
obras yo
puedo
hacer.
Levántate
ahora mi
criatura,
sacude
el polvo
de tu
miseria
y
vístete
de mi
misericordia.,
toma
todos
tus
harapos
y ven a
mi yo
voy
restaurar
esa esas
ropas
que
vistes y
las
remendare
de mi
amor.
No
pienses
que todo
es en
vano, yo
nunca
desecho
a quien
a mi
viene.
¿Preguntarás
cómo,
dirás
cómo
empiezo?
Arrodíllate
ahora
donde
estás,
ábreme
tu
corazón,
comienza
lentamente
a
decirme
lo que
te
falta,
lo que
te
aqueja.
Pon
delante
de mi
tus
debilidades
y deja
que yo
obre. No
esperes
que algo
mágico
ocurra
sino
deja que
yo lo
ordenare
todo
lentamente.
No te
sorprendas
de que
todo se
de
vueltas
como no
te
esperabas,
sino que
mira que
mi mano
está
construyendo
y
deshaciendo
lo que
debe
cambiar,
lo que
debe ser
restaurado.
Repite
las
palabras
del
Salmo
86:3–7
“Ten
misericordia
de mí,
oh
SEÑOR;
porque a
ti clamo
cada
día.
Alegra
el alma
de tu
siervo;
porque a
ti, oh
Señor,
levanto
mi alma.
Porque
tú,
Señor, eres
bueno y
perdonador,
y grande
en
misericordia
para con
todos
los que
te
invocan.
Escucha,
oh
SEÑOR,
mi
oración,
y está
atento a
la voz
de mis
ruegos.
En el
día de
mi
angustia
te
llamame;
porque
[tú] me
respondes.
Ahora
sólo
espera y
apártate
de lo
malo ¡y
te
bendeciré!
Dice
el Señor.
Por:
Lic.
José
Luis
Malnis
Si no
has
hecho la
oración
de fe,
ésta es
tu
oportunidad
de
decirle
al único
que te
puede
garantizar
la vida
eterna y
una
prosperidad
permanente,
lo
siguiente:
Señor
Jesús he
pecado
contra
ti,
contra
el cielo
y contra
mi
cuerpo
que es
templo
del
Espíritu
Santo,
te pido
perdón y
me
arrepiento
de todos
mis
pecados,
límpiame
e
inscribe
mi
nombre
en el
libro de
la vida.
Clic
aquí
para que
te
fortalezcas
en el
Señor
 
|